martes, junio 27, 2017

Origen del colibrí - Leyenda

Hola Andres buen día, antes que nada decirte que me encanto tu blog y todas sus publicaciones.

Te comento mi experiencia con los colibrís para mí, seres mágicos.

Tengo tiempo tratando de entender los cambios que han pasado en mi vida últimamente ,un día pedí a mi mama que ya no está en este plan terrenal conmigo, me enviara un mensaje de fuerza ,algo que yo sintiera que ella me anima a seguir. De pronto aparecieron colibrís en el patio de mi trabajo (soy maestra de primaria) asombrados mis alumnos y yo comenzamos a observarlos cada que nos visitaban y se quedaban descansando mientras nosotros estábamos en el jardín ya que volvíamos a nuestro salón de clases se retiraban.

Cada día eran más colibrís y el verlos me daba una paz y una alegría inexplicable.
Al imprimir las evaluaciones para mis alumnos en el área de comprensión lectora venia esta hermosa leyenda que te anexe al correo. Para mí fue sorprendente de principio a fin esta hermosa leyenda maya.


Gracias Andres por tu blog y por permitirnos unir este reconocimiento a tan bella y mística ave. Bendiciones


Los mayas más viejos y sabios, cuentan que los dioses crearon todas las cosas en la Tierra y al hacerlo, a cada animal, a cada árbol y a cada piedra le encargaron un trabajo. Pero cuando ya habían terminado, notaron que no había nadie encargado de llevar sus deseos y pensamientos de un lugar a otro.

Como ya no tenían barro ni maíz para hacer otro animal, tomaron una piedra de jade y con ella tallaron una flecha muy pequeña. Cuando estuvo lista, soplaron sobre ella y la pequeña flecha salió volando. Ya no era más una simple flecha, ahora tenía vida, los dioses habían creado al ts'unu'um (colibrí).

Era tan frágil y tan ligera que el colibrí podía acercarse a las flores más delicadas sin mover un solo pétalo, sus plumas brillaban bajo el sol como gotas de lluvia y reflejaban todos los colores.

Entonces los hombres trataron de atrapar a esa hermosa ave para adornarse con sus plumas. Los dioses, al verlo, se enojaron y dijeron: "si alguien se atreve a atrapar algún colibrí, este morirá". Por eso es que nadie ha visto alguna vez a un colibrí en una jaula, ni tampoco en la mano de un hombre.

De esta forma es que esta misteriosa y delicada ave ha podido llevar a cabo el encargo de los dioses: "El colibrí lleva de aquí para allá los pensamientos de los hombres" Si alguien te desea un bien, el colibrí tomará ese deseo y lo llevará hacia ti.